Cali, noviembre 1 de 2009

Anoche, la bióloga Marcela Prieto, de 26 años, sufrió una terrible decepción cuando su novio, el también biólogo Alejandro Guerrero, la llamó “mami”1. «Hace un mes que no nos veíamos porque él está terminando un estudio en Buenaventura2. Nos estábamos besando todo rico y me estaba quitando la ropa despacito cuando me va diciendo dizque mami. El muy guiso3 me bajó toda la calentura de una», afirmó Marcela, mientras solicitaba un servicio de taxi. Visiblemente sorprendido, Alejandro, de 28 años, le dijo a esta agencia que Marcela suele sobreactuarse en estos casos: “No sé porque le dije mami pero eso tampoco es motivo para que salga corriendo y me deje iniciado. ¡Mucha calientahuevos!4 ¡Y yo con esta urgencia! Pero de hoy no paso, necias5 es lo que hay en la calle”. Según pudo constatar A-Pin, Guerrero salió de su apartamento minutos después con destino al barrio Granada, zona rosa de Cali. (Informó El Mantra)
1 Expresión de cariño usada generalmente por las clases populares. «Mami, venga yo la cargo».
2 Puerto ubicado en el Pacífico colombiano, a 123 km. de Cali. Es común escuchar la palabra «mami» en sus calles.
3 Forma despectiva con la que se llama a las personas que hace y dicen cosas burdas. También se les llama así a las empleadas domésticas ya que éstas cocinan, cómo no, guiso.

4 Mujer que insinúa actos sexuales pero que nunca los lleva a feliz término.
5 Necia: eufemismo para prostituta.