Tras escuchar una conversación entre dos mujeres en el bus que lo llevaba al trabajo, el ingeniero forestal Javier Rodríguez decidió cortarse los pelos de la nariz tan pronto regresara a casa. Según le contó Rodríguez a A-Pin, nunca se le había ocurrido que los vellos nasales fueran importantes para el sexo opuesto: “Me impresionó mucho oír decir a esas muchachas que un amigo les parecía asqueroso porque tenía la nariz llena de pelos, y que les daba vergüenza sugerirle que se los cortara por miedo a que se sintiera mal.” Este reportero constató que Rodríguez, de 35 años, es dueño de unas fosas nasales bastante pobladas: “hace como unos seis o siete años que empezaron a crecer así, y hace como cuatro años que se asoman”, aseguró. Anoche, Rodríguez se quejó de que a pesar de haberse cortado las puntas de dicho pelamen, el exterior quedó al ras, en una especie de “efecto cepillo”. Marina Oquendo, cosmetóloga consultada por A-Pin, le recomienda a Javier cortarlos más adentro pero de forma moderada, y retirar algunos con pinza, conservando la protección contra el polvo y las impurezas del aire. (Para A-Pin, informó Tumadre)
Que mala noticia para los pinochos masculinos
Brutal de buena.Además del servicio social.