El empresario Juan Felipe Restrepo puso seis chuzos de pollo a descongelar en un asador de gas mientras asaba una sierra de 24 centímetros con dos tajadas de pimentón. El propietario de la máquina contó que los chuzos reposaron en el compartimento de rostización durante media hora y luego procedió a asarlos: «Es que nos vamos a comer la sierra a modo de entrada y luego nos comemos los chuzos», afirmó Restrepo, quien acababa de recibir la visita de tres amigos. En las rendijas del asador se ven las gotas que destilaron los chuzos en el proceso de descongelamiento. «Pipe es un fanático de los asados, si la mujer se va ocho días de viaje, él hace ocho asados, por eso compró ese asador que de lo grande parece un carro de perros», fue lo que declaró Samuel Saldarriaga, uno de los comensales. (Informó A-Pin)
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