Girardot, Cundinamarca, septiembre 27 de 2010

Esta tarde, cuando el señor Martín Sosa hacía una siesta, la empleada doméstica Gloria Monsalve entró a su habitación a recoger el pocillo del tinto y no se aguantó las ganas de hacerle cosquillas en la planta del pie: “No pensé que fuera grave. Así le hacía yo a mi hijo cuando estaba chiquito y se moría de la risa”, dijo Gloria, de 34 años, después de recibir un regaño de su patrona y una amenaza de despido por parte del afectado. “Eso es abuso de confianza. Ninguna empleada con cinco dedos de frente se atreve a tocar al patrón, y menos a hacerle cosquillas”, afirmó Sosa con el ceño fruncido. Su esposa, Margarita Rivera, le contó a A-Pin que estaba en la sala leyendo una revista cuando oyó el grito del hombre desde el segundo piso: “Pensé que Gloria había quebrado algo porque es más bien manisuelta*, pero nunca imaginé que hubiera cometido semejante atrevimiento”. Aunque Sosa insistió en despedirla, Margarita optó por perdonarla luego de que ella se comprometió a respetarlos. “De ahora en adelante no los vuelvo a tocar, por tocados”, concluyó Gloria, y se encerró en el baño a llorar. (Para A-Pin, informó Koleia)

*Manisuelto. Expresión coloquial para describir a aquellas personas a las que todo se les cae, que no pueden ni con lo más liviano. De la misma familia de “manirroto”, que quiere decir derrochón, que gasta dinero a diestra y siniestra.

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