Medellín (A-Pin). La operaria Yaneth Carmona, de 30 años, se rehusó ayer a ser desplazada en una camilla luego de que sufriera un mareo en un vagón del metro. Testigos que viajaban en el mismo coche dijeron que en cuanto la mujer vio la cama portátil sobre la plataforma de la estación Hospital pareció sentirse mejor. “La señora iba parada y de un momento a otro se desvaneció, entonces la sentamos y un señor hundió el botón rojo, pero cuando llegamos a la estación ahí mismo abrió los ojos y dijo que no necesitaba la camilla”, le contó Esteban Uribe a este diario. Yaneth, quien trabaja en una fábrica de confecciones, declaró: “No sé qué me pasó, de repente sentí un calor horrible y ya no supe más hasta que vi que me iban a recoger en eso… ¡Qué pena!”. Según conoció A-Pin, Carmona salió caminando del vagón y fue recibida por dos auxiliares que intentaron conducirla a un cuarto de reposo. “No, no, yo estoy bien, un poco débil pero bien, sólo quiero llegar a la casa y pasar esta vergüenza tan grande de haberme mareado en el metro”, señaló Yaneth segundos antes de abordar un bus hacia el municipio de Bello.