Cusco, Perú (A-Pin). El profesor Bernardino Gálvez, hincha furibundo del Club Sportivo Cienciano, soportó parado los últimos minutos del partido que su equipo ganó finalmente 2-1 al Juan Aurich de la ciudad de Chiclayo. “Empecé a sufrir desde que nos empataron”, declaró Gálvez, quien trabaja en el Colegio Nacional de Ciencias y Artes, institución que dio origen al Cienciano hace ciento diez años. “No podíamos perder la punta* en casa”, agregó el hombre, apostado en la tribuna norte del Inca Gracilaso de la Vega. A-Pin fue testigo de que Bernardino padeció de pie los últimos instantes del juego, llevándose las manos a la cabeza o agachándose cada vez que Juan Aurich se acercaba al arco de ‘El Papá’**. [Más Copa América]