Medellín (A-Pin). Con rasguños en cara y manos despertó esta mañana la trabajadora social Margarita Botero, de 28 años. “La única explicación que encuentro es que me haya aruñado yo misma dormida”, le dijo Botero a A-Pin mientras se miraba las pequeñas heridas en los dedos de la mano izquierda. “Debe ser que como ya tengo las uñas un poquito largas me rasguño cuando me muevo en la cama”, agregó Margarita. Sin embargo, Javier Acevedo, su esposo, desestimó en parte estas afirmaciones al declarar que “esos aruñones se los hace ella pero en el día y no se da cuenta”: “No sabe tener las uñas largas, se lastima lavándose las manos, cepillándose los dientes, hasta corriéndose el pelo de la cara”, aseguró el hombre, dedicado a las ventas por catálogo. Tras aceptar esa posibilidad, la profesional anunció que tomaría las medidas del caso: “Pero tal vez no tenga tiempo sino hasta la próxima semana porque ando súper ocupada”, puntualizó.