Medellín, mayo 31 de 2009

Ayer en la tarde, tras reunir todos los productos de su lista de mercado en un carrito de compras del Carrefour de la 65, el filósofo Francisco Guzmán y su hija Sabina fueron a la sección de congelados a degustar un nuevo helado que se promocionaba. Al parecer, el intelectual se emocionó tanto con el exótico sabor de “frutos amarillos”, que se “elevó”*. “Yo era la que llevaba el carrito, pero de pronto él agarró otro sin mirar, y ni se dio cuenta de que había un bolso de mujer en el asiento de niños”, contó la joven, de 22 años, quien agregó: “un señor empezó a gritarle ‘¡Ey, amigo!’, pero mi papá siguió avanzando tranquilo, entonces el tipo lo alcanzó en tres zancadas y le dijo: ‘Amigo, este es mi carrito’”. Apenado, el filósofo respondió: “Ay joven, discúlpeme, es que llevamos productos iguales”. Guzmán le contó a A-Pin que le gusta mercar los sábados porque “hay degustaciones de todo”: “¿Así quién no se eleva?, imagínese usted que le den a uno degustación de helado, ¡Eso no se ve nunca!”, concluyó. A-Pin confirmó que el nuevo helado es una cremosa mezcla de mango y maracuyá. (Para A-Pin, informó Sabigüita)
*Distrajo.