Rionegro, Antioquia (APin). En la pasada edición de la media maratón de este municipio, el atleta máster Octavio Núñez decidió buscar una modesta ayuda para sobrellevar parte del recorrido que, con el agobiante sol de mediodía, se hacía cada vez más difícil. Según testigos, al ver un carro que venía por la misma vía que los atletas, Octavio pidió a sus ocupantes que lo llevaran. “La idea era recobrar un poquito de fuerzas y, por qué no, aventajar a algunos de mis compañeros”, confesó el deportista. APin conoció que una vez instalado en el vehículo, Núñez se percató de que por el cierre de vías, el carro se debía desplazar a un paso incluso más lento que el que él llevaba. “El señor se subió muy contento, pero al ratico tenía una cara de decepción…”, relató Leonardo Baena, conductor del auto, y agregó que el atleta se desesperó “del todo” cuando llegaron a un punto en el que ya no era permitido el paso de vehículos. “Me tuve que bajar y retomar el último tramo”, dijo Octavio al final del recorrido, cansado y molesto, con una marca de dos horas y media. “Le salió muy mal el intento, antes perdió tiempo”, declaró uno de los compañeros de Núñez quien no dio más datos. (Informó Natalia R)

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