Anoche, el joven Felipe Jaramillo sufrió un espasmo en la zona trasera de su muslo derecho luego de hacer un movimiento involuntario mientras dormía. “Ayer tarde jugué fútbol con los compañeros de la universidad y cuando llegué a la casa me duché y me acosté muy cansado”, manifestó el afectado, quien bebió un poco de bicarbonato de soda en un pocillo de porcelana y continuó: “Estaba foquiao* y de pronto me despertó un dolor intenso, como de hormigas puntiagudas dentro del músculo, se me puso duro y cada vez se me contraía más, insoportable”, aseguró el estudiante de Economía. Mario, hermano menor de Jaramillo, le confirmó a A-Pin que un pequeño barullo en la cama de Felipe lo despertó: “Primero gritó y se revolcó en seco, luego se quejaba contra la almohada para no hacer ruido y con una mano se agarraba el muslo, y con la otra le pegaba puños al colchón”, afirmó. Según el propio Felipe, el episodio ocurrió durante el conticinio: “Ya estaba entrada la noche, todo estaba en silencio, solo existía mi dolor y mi angustia”, declaró, antes de darle otro trago al remedio. (InfoRmó: A-Pin)
*Profundamente dormido.
Apenas leí este artículo me sentí totalmente identificada, hace días vengo siendo víctima de estos aterradores calambres, pero en la planta del pie derecho. Cuando esto sucede si que es un desagradable acontecimiento!!!
Nos alegra, Anónima, que te sientas identificada con los reportes de la Agencia… y ya sabés, para los calambres, soda ventiada. Un saludo.
Qué es este belleza de noticia!! Me hizo acordar de una vez que me pasó lo mismo, en Campus Party, cuando desperté de un grito a todos los de las carpas vecinas. Jajajajaja.