Medellín, octubre 23 de 2009

Esta mañana, a la estudiante de sicología Andrea Navarro, de 21 años, se le adhirieron cinco semillas de mandarina a su antebrazo izquierdo. La joven se había comido la fruta mientras navegaba en Internet, situando temporalmente las “pepitas” al lado de su computador portátil. “Le iba a mostrar a mi hermano unas fotos en Facebook y cuando levanté el brazo para inclinar la pantalla, tenía pegadas varias pepitas en la parte gordita del brazo, cerquita al codo”, afirmó Andrea, quien luego precisó que por las mañanas “no me puede faltar la fruta: papayita, manzana, piña, la que haya”. Carlos Navarro, de 24 años y hermano de la afectada, informó que “una pepa se le cayó ahí mismo, pero las otras cuatro se le quedaron pegadas y hasta le quedaron los hundidos en la piel”, y anotó que Andrea botó las cáscaras y las semillas una vez salió del cuarto porque “a ella no le gusta botar cosas orgánicas en su pieza”. Luego de examinar la extremidad, A-Pin pudo establecer que la adhesión se produjo por la presión involuntaria del brazo contra las semillas y el escritorio. (Informó: A-Pin)