Medellín, febrero 4 de 2010

Aunque la psicóloga de 24 años Luisa Hernández acostumbra hablar dormida, lo de anoche fue, según su hermana Marcela, «tenebroso”. “Las muchachas están durmiendo en la misma pieza porque estamos haciendo unos arreglos en la casa, pero no pensamos que un incidente de estos fuera a afectar tanto a Marce: hoy casi pierde un examen de la U”, explicó su mamá, María José Ocampo. Ante la insistencia de esta reportera para conocer detalles del hecho, Marcela, comunicadora de 27 años, narró aterrorizada: “Todos estaban dormidos menos yo, que estaba leyendo un documento para un examen de esta mañana, y como a las doce Luisa abrió los ojos, se sentó, me miró y dijo rapidito y sin tomar aire: ‘mano, mano, mano, mano, mano, mano’, después me miró como dos segundos, se acostó y se quedó dormida. Me pegué mero susto, apagué la luz, me metí entre las cobijas y no me moví en toda la noche”. Al consultarle a la sonámbula sobre su sueño aseguró que no recordaba nada, pero que averiguaría si había algún significado oculto. (Para A-Pin, informó Maria-LaPeriodista)

Esta noticia de María Cecilia Hernández participó en el Primer Premio GRAN PINOCHO de Microficción Periodística, 2009.