Medellín, marzo 3 de 2010

Anoche, Arelis Gil, estudiante universitaria de 22 años, se entusiasmó más de lo debido con un remedio para la afonía que le recomendaron sus amigos, y que consistía en una mezcla de ron caliente, miel y limón. El hecho se registró en un bar del centro de la ciudad, donde la joven se reunió con varios compañeros a celebrar un cumpleaños. “La idea era que se le aclarara un poco la garganta, porque estaba muda del todo”, dijo Diana Henao, una de las asistentes, quien agregó que la pócima “es efectiva pero si se toma sólo una dosis”. Sobre el caso, Esteban Cárdenas, mesero del lugar, explicó: “Yo le seguí sirviendo porque ella me miraba y señalaba la copita… hasta pensé que se estaba aliviando”. No obstante, a medida que la noche avanzaba, “Arito seguía callada”, dijo José Escobar, otro de los presentes, quien añadió: “Estábamos conversando todos cuando en un momento se paró para ir al baño y casi se cae de lo borracha que estaba”. A-Pin no pudo obtener declaraciones de Arelis, pero otro de sus amigos dijo: “Sabiendo el problema que ella tiene con el alcohol, debimos haber ido a alguna farmacia”. (Informó A-Pin)