El señor Ignacio Henao, de 52 años, quien luego de recorrer varios almacenes encontró los sillones de color claro que andaba buscando, “para poder ver los zancudos para matarlos”.
El señor Ignacio Henao, de 52 años, quien luego de recorrer varios almacenes encontró los sillones de color claro que andaba buscando, “para poder ver los zancudos para matarlos”.
jajajjaja pobre el que tenga que lavar los muebles, untados de sangre y restos de zancudo! jajaja
Cuentos cortos… Muy bueno!