Medellín, junio 28 de 2010

Esta mañana, el docente universitario Darío Osorio, de 43 años, viajó en Metro con una pluma de pavo real de unos 65 centímetros en su mano derecha. El recorrido inició en la estación San Antonio del Metro, en el centro de la ciudad, y terminó en la estación Floresta, al centro occidente. “La pluma es para mi señora madre; ella está en un taller de manualidades donde les enseñan a hacer adornos y pequeñas instalaciones decorativas”, explicó Osorio, quien también llevaba una bolsita blanca con un vástago de trébol. “No sé la verdad de qué se trata lo que van a hacer en el taller, pero también pidió girasoles”, añadió el profesor. Carlos Garcés, policía auxiliar encargado de vigilar el Metro, indicó: “Está prohibido viajar con animales… Pero con plumas no hay ningún problema”, aseguró. Testigos le confirmaron a A-Pin que Osorio mantuvo la pluma y el gajo de trébol en su mano derecha durante todo el trayecto: “La pluma está un poco opaca, me costó tres mil pesos en La Minorista… La próxima la compro con los colores verde y azul más vivos”, concluyó, con el cuerpo de frente a una de las puertas del vagón. (Informó A-Pin)

Esta noticia fue publicada originalmente en abril de 2010 en el periódico Universo Centro.