Medellín, julio 22 de 2010.

Ayer en la tarde, el ingeniero agrónomo Daniel Camacho decidió no guaracerse cuando comenzó el fuerte aguacero que azotó el Valle de Aburrá. Alberto Restrepo, vecino de Camacho, cuenta que iba en su carro cerca de su casa, cuando vio a Daniel caminando bajo la lluvia y se acercó para ofrecerse a «arrimarlo»: «Él muy tranquilo me dio las gracias y me dijo que así estaba bien, que una vez al año no hacía daño». El propio Daniel, de 32 años, le contó a este diario que hacía rato no caminaba desde el trabajo hasta su casa, y que cuando empezó a llover se sintió fresco: «Me acuerdo que cuando estaba en la universidad nunca le huía a la lluvia, pero uno con el tiempo se va volviendo aburridor». Su madre, Luz Ángela Bernal, se mostró incrédula, y declaró molesta: «Eso de que se quiso mojar no se lo cree ni él. Algo raro tuvo que haber pasado para que haya llegado aquí escurriendo agua, pero como con él todo es un misterio vaya pues uno a saber». Daniel prefirió no contestar estas acusaciones. (Informó: A-Pin)