El conductor de taxi Maximiliano Marín viajó con una mariposa dentro de su vehículo por un lapso de tiempo desconocido. «No me había dado cuenta», declaró Marín, quien transportaba a una mujer desde el centro de Medellín hacia el sector del Estadio. «Parece agonizando porque mire como mueve las alas», apuntó la pasajera. Sin embargo, Marín afirmó que la lepidóptera estaba viva: «Es el viento el que le mueve las alas así rápido», aseguró. Al terminar el recorrido, Marín indicó que le parecía «agradable» estar acompañado por la mariposa. «Ahí sigo viajando con ella», sentenció. (Informó A-Pin)
Es tan excaso y valioso una mariposa en esta ciudad… Es triste su rareza… (Entiendase rareza como la disminución de la presencia)
Goper, un «excaso» es una rareza (entendida como hecho excepcional). Es también poco común que una mariposa se golee el pasaje, pero no sé que tan extraño sea que la pasajera no haya puesto el grito en cielo y que el conductor muestre tal sentimiento de agradecimiento con el bicho.
Estas selvas de cemento han logrado acabar con mucho de lo natural que solia existir.