Bogotá, noviembre 17 de 2010

El pasado sábado, un perro llamado Titán* se tragó una pelota de futbolín** y frustró el mini-torneo que un grupo de amigos se disponía a celebrar. Según se informó, dichas competencias se venían disputando semanas atrás, desde que “en hechos confusos” se dañó el Play Station de uno de ellos. A-Pin estableció que inicialmente no se tenían pistas de la esfera: «Fue como si se la hubiera tragado la tierra», comentó con voz entrecortada Javier Roldán, el local y presunto favorito para ganar las cervezas en disputa. Se supo además que las labores de búsqueda involucraron a Dorita Pérez, madre de Javier, quien habría sugerido: “Miren bien debajo del bifé, si no está ahí fue que se la comió Titán”. Este lunes, unas radiografías mostraron que la pelota y un anillo de oro estaban alojados en el estómago del animal, con lo que se descartó la versión de las tías de Javier que lo acusaban de vender cosas de la casa “para beber”. A-Pin confirmó de buena fuente que las tías intentarán resarcirse con su, desde hoy, sobrino preferido: «Con una frijolada bien trancada de esas que tanto le gustan». (Para A-Pin, informó @Triego)

*Nombre cambiado por seguridad del canino.
**Fútbol de mesa: juguete que consiste en un cajón rectangular que imita una cnacha de fútbol, sobre cuyas paredes laterales se insertan barritas de metal que sostienen jugadores más aptos que muchos del torneo nacional.