Aguas del Océano Pacífico, Panamá, diciembre 5 de 2010

Durante un viaje de 17 horas por el Océano Pacífico, entre el caserío de Jaqué y Ciudad de Panamá, seis pasajeros del barco mercante El Amparo declararon su odio al pastor cristiano Omar Araujo, también a bordo. Según los viajeros, desde el primer momento en que subió al barco, Araujo trató “con indelicadeza” a las mujeres, obligándolas a moverse de puesto “para que él estuviera más cómodo”: “Es un farsante. En el pueblo pidió plata con su discurso, le dieron comida y hasta el pasaje, y cuando se montó al barco sacó la Biblia dizque para bendecir el viaje, pero como a las dos horas nos empezó a insultar”, dijo Marciana Sierra, chocoana residente en Panamá. A-Pin conoció que el pastor es salvadoreño e iba de regreso a su país después de dos años de viaje por Centroamérica: “Un día Dios me dijo: ‘Hijo, vete a predicar a Suramérica’. Yo tenía siete dólares en el bolsillo, pero como era la voz de Dios la que me lo ordenaba, empaqué y me fui”, declaró. Ante la rabia que produjo su presencia entre los pasajeros, se defendió: “La intolerancia es un pecado que debemos combatir. Le pido a Dios que los perdone”. (Para A-Pin, informó KoleiaTrip)

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