El señor Mauricio Valencia, quien se encuentra disfrutando sus vacaciones en la playa de ‘El Calao’, en el departamento de Córdoba, decidió a último minuto tatuarse una imagen zoofílica en lugar de un ícono del Divino Niño. “Son tatuajes con jagua* que duran algunos días en la piel y luego se van borrando”, declaró Valencia, quien en un principio se inclinó por la figura religiosa pero al descubrir en el muestrario la imagen del “costeño comiéndose** a la burra” se animó a cambiar la decisión. “Mis amigos ahí mismo se rieron y como estamos de chacota me pareció muy bacano”, afirmó el hombre. A-Pin habló con José Luis Rodríguez y Richard Peña, dueños del negocio: “Sacamos las figuras de Internet y hacemos los moldes en acetato”, explicó Peña. Este diario conoció que el tatuaje sólo duró medio día. “Como ya se está acabando la temporada, seguro la jagua ya está vieja y perdió sus propiedades”, especuló uno de los amigos de Valencia. (Informó A-Pin)