Bogotá (A-Pin). El sábado pasado, la joven Ángela Pérez decidió enterrar en una amplia matera rectangular del teatro Atlantis una boleta para asistir a la función de las 5:30 pm que pertenecía a su amiga Alejandra Abello. “Llevaba más de media hora esperando, estaba desesperada y no quería entrar al teatro con la película empezada”, declaró molesta Ángela. A-Pin conoció que, tras diez minutos de haber empezado la función, Alejandra arribó al cine y procedió a localizar el escondite de la boleta: “Cavé y cavé en esa matera. Ella dijo que estaba en la mata ‘mocha’ debajo de unas hojas secas pero no vi nada”. Con respecto al incidente, Ángela aseguró que no es la primera vez que Alejandra se retrasa. “Le insistí para salir y buscar yo misma la boleta, pero creo que ella tenía remordimiento por su demora y ya después me embobé”, agregó. Un guardia del teatro, quien prefirió no dar su nombre, informó que una vez terminó la función, Ángela se dirigió a la matera y sacó un papelito que al parecer era la boleta: “Creo que ella no se supo explicar, debería dibujar un mapa para la próxima”, afirmó el testigo.