Quito (A-Pin). Una hora después de terminado el partido entre su equipo Riverton y el Dínamo, ambos oncenos aficionados, Eduardo Suárez respondió su teléfono móvil portando aún sus guayos y canilleras. “Siempre me incomodan pero se me olvidó quitármelos”, afirmó Suárez, en las afueras de uno de los restaurantes de la Plaza del Quinde, donde se encontraba departiendo con sus amigos. “Salimos del partido y nos vinimos a tomar unas cervezas”, agregó el hombre, volante “de ida y vuelta”* del Riverton, quien admitió ser el único del equipo que todavía tenía puestas las canilleras. Aunque A-Pin no conoció detalles sobre la persona que lo llamó, sí escuchó apartes de la conversación en la que Eduardo informaba el marcador final del cotejo: Riverton 4- Dínamo 2.
eso es muy comun antes y despues de los partidos aficionados!! antes llamando a los que siempre llegan tarde y despues informando resultados!!