Medellín (A-Pin). Ayer en la noche, el estudiante de Administración de Empresas Julián Correa, de 22 años, envió un balón a la quebrada La Presidenta luego de rematar a una de las porterías de la cancha de microfútbol ubicada sobre la carrera 43D con calle 11, barrio Manila, El Poblado. “Ni siquiera habíamos empezado el partido”, declaró Daniel Posada, uno de los amigos de Correa, quien contó que estaban esperando algunas personas para completar las nóminas cuando sucedieron los hechos. “Siempre le hacemos tiros* al arquero y vamos calentando mientras llegan los demás”, agregó Posada en momentos en que Correa intentaba rescatar el balón de la quebrada. Gustavo Agudelo, compañero de universidad del afectado, dijo que éste es muy “acelerado” para jugar fútbol: “No para el balón, sino que de una manda severos riendazos**”, afirmó. Sobre el incidente, Alejandro Tobón, quien oficiaba de arquero, aseveró: “Es que jugar con balón de fútbol en cancha de cemento no es para cualquiera”, mientras que Correa, con el balón húmedo en sus manos, explicó: “Difícil controlar esa pelota porque rebota mucho”.

*Hacer chutes suaves y a media altura para calentar, tanto las piernas del cobrador como los brazos del guardameta.
**Viene de rienda, de látigo. Zapatazos fuertes, por lo general pateados con el empeine, o, peor aún, con la punta del zapato.