Medellín (A-Pin). Dos colchones de algodón, de la tradicional tela de rayas, por los que la señora Cielo Zuluaga pagó más de 20 mil pesos para que Empresas Varias (EEVV) le botara, fueron recogidos ayer por un hombre que, al verlos en la acera, dijo necesitarlos. “Los tuve dos semanas en la sala mientras averiguaba cómo hacer para que me los recogieran y los depositaran bien. No quería que terminaran reciclados, revendidos o en una quebrada”, declaró Cielo, quien sólo sacó las dos piezas a la calle cuando le fue programada la recogida por parte de la empresa, luego de hacer la consignación. Sin embargo, a pesar de su precaución, la mujer vio desde el balcón de su quinto piso cómo un hombre se adelantaba a la llegada del camión. “Apenas escuché que Cielo gritaba que no se los llevara, me asomé. El señor iba con uno de los colchones al hombro y diciendo que los necesitaba”, contó Faber Salazar, del segundo piso. La ex dueña de los trajinados colchones no tuvo más opción que llamar a la línea amiga de EEVV para cancelar el servicio. “Que gracias por avisar pero que no tenía derecho a la devolución de la plata”, aclaró Cielo. (Informó Natalia Rodríguez)