Bogotá (A-Pin). Esta mañana, el editor Joaquín Jiménez descubrió por qué lo perturba tanto encontrar palomas solitarias a su paso. Jiménez cruza varias veces al día la Plaza de Bolívar entre su casa y su trabajo, y se declara enemigo de las hordas que allí pululan: “Son nubes de parásitos, con plumas repletas de parásitos”, dijo. Hoy, sin embargo, entendió de repente por qué mengua su odio cuando no están en grupo: “Es ese cuello tan débil, los ojos ansiosos, la indecisión al andar… son casi humanas”.

Noticia producida originalmente para el portal francés Worbz. Lea la versión gala AQUÍ.