Lima, Perú (A-Pin). Mientras esperaba el cambio de semáforo en el cruce de la calle Tacna con Moquegua, Gonzalo Calderón, de 42 años y conductor de un Chevrolet Aveo plateado, lanzó un salivazo a un trapo para limpiar la imagen de Nuestra Señora de Lima que colgaba del retrovisor de su auto. “Está muy sucia y he salido de casa sin limpiarla”, explicó el hombre, nacido en Ayacucho, y quien indicó que usó su propia saliva “porque no tenía agua”. Sobre el pedazo de tela utilizado, Gonzalo señaló: “Con él limpio el parabrisas, la silla, los espejos. Sirve para todo”. A-Pin fue testigo de que los diecisiete segundos más que duró el semáforo en rojo, le alcanzaron a Calderón para acomodar la tira con la que estaba amarrada la imagen religiosa. “Le pido a la ‘Madrecita’ para que no falte nada”, puntualizó, pasando una de las mangas de su camisa por el rostro de Nuestra Señora. [Más A-Pin Viajero]