Medellín (A-Pin). Esta mañana, cuando se disponía a salir para el trabajo, Stephanie Rendón abrió por última vez su clóset para guardar las pantuflas y encontró entre sus zapatos a su gato Menjurje. Según estableció A-Pin, el felino estuvo atrapado allí unas dos horas. «Lo descubrí todo cómodo acostado sobre mis botas de gamuza», afirmó Rendón. Preocupada por la posibilidad de haberlo dejado encerrado durante todo el día, la mujer increpó al gato reclamándole por no haber hecho ningún ruido, ante lo cual Menjurje no emitió sonido alguno y se limitó a rozar su cola por las piernas de la joven. “¡Qué susto!”, exclamó Stephanie mientras cogía su bolso para salir de casa. (Informó gwen)

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